29 de marzo de 2020

Las fotos de la despedida

El 14 de marzo pasará a la historia como el día en el que un hecho inédito en la vida moderna del planeta nos afectó a todos los españoles en nuestra confortable existencia. Ese maldito 14 de marzo fue un día en el que ya todos sabíamos que la vida nos iba a cambiar radicalmente como nunca antes hubiéramos imaginado. Nos adentrábamos en un terreno inexplorado, de resultados inciertos, en una mala pesadilla de esas que todos hemos visto decenas de veces en ese empalagoso cine estadounidense en el que un solo hombre -norteamericano, por supuesto-, abandonado a su suerte, es capaz, sin ayuda de nadie más, de salvar él solo la vida humana en el planeta. Esa noche de sábado me pareció que yo también entraba a formar parte del elenco de una de esas malas películas yanquis de héroes extraordinarios, con banderas de barras y estrellas hondeando tras de sí. Me pareció que repentinamente todos entramos a trabajar, como con una bofetada bien dada, en el reparto de uno de esos filmes simplones, pensados para pasar las tardes de los fines de semana, sin más pretensión. Y como para dar visos de realidad a esa sensación, aquel día 14 era un sábado, día perfecto, por lo tanto, para sufrir de una de esas películas; pero esta vez desde dentro. Formábamos parte de un argumento impensable.

Yo esa tarde de sábado ya sabía, como todos porque era algo advertido y anunciado, que era mi última tarde en el campo durante un largo período de tiempo. Disfrutaba de mis intentos a algunos pajarillos que no querían entrar a posarse donde yo deseaba para fotografiarlos. Como para compensar, una perdiz quiso subir al montón de restos de maíz y posar unos minutos para que la fotografiara, como para despedirse de mí. O mejor dicho, para permitir que yo me despidiera de la naturaleza durante semanas. Estas imágenes forman parte, pues, de mi última sesión de fotos hasta ...

No sabemos aún hasta cuándo, ahora que ya han pasado dos semanas de encierro y nos restan al menos otras dos. Estamos mediando el guión y aún resta bastante para que concluya la obra. Participamos en una mala película de serie B de la que aún no sabemos cuál va a ser el desenlace final. Salud y nos vemos tras los créditos.



2 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Sobre todo mucha salud, es lo que siempre mejor se ha podido desear a todo el mundo. Mucha salud también para ti y los tuyos, Teresa. Un beso.

      Eliminar