Vivir es un tránsito, un camino en donde todos somos nómadas. Que la travesía merezca la pena, depende de ti.

12 de febrero de 2015

Animales

Nos llamáis animales, vosotros que os creéis la especie suprema, el culmen de la creación y la evolución. La misma especie a la que estáis convencidos que se os ha otorgado el planeta entero, con derecho a expoliarlo y destruirlo. Auto-complacientes. Auto-suficientes. Camináis por el globo con la prepotencia del necio, del ruin y del malvado. Del poderoso y dominador, del mezquino y miserable. No quiero pensar ahora en lo que os hacéis entre vosotros mismos; allá vosotros y el modo en el que os masacráis en vuestras guerras. No quiero pensar en vosotros porque me dais igual. Pero sí lo hago en el resto de seres vivos que heredamos este planeta que es de todos, y en cómo nos tratáis. Desbordáis crueldad por cada poro de vuestra piel. Os divertís con brutalidad a través de nuestro sufrimiento, del que soportamos los animales, os inventáis modos salvajes para asesinar y torturar toros, y lo denomináis cultura, tradición y raíces. O destrozáis perros o gallos para apostar. Llamáis actividad lúdica a la masacre anual de millones de animales tiroteados en todo el planeta por personas que insultan a la inteligencia cuando dicen ser "amantes de la naturaleza". Sí, millones de seres vivos que pierden sus vidas para que unos pocos humanos se regocijen mediante lo que denomináis el "deporte"de la caza. Extinguís conscientemente especies marinas por sobreexplotación. Nos arrancáis las pieles, a veces vivos, para haceros abrigos y vestiros con ellas. Envenenáis el campo para perseguir aquellos animales que regulan los ecosistemas, aunque por el camino caigan también muchas otras especies que incluso decís proteger. Si una especie afecta a vuestra economía y vuestros negocios simplemente la elimináis a base de plaguicidas, pesticidas o a tiro limpio. Comerciáis con los animales salvajes como si fuéramos objetos. Cuanto más raros y en peligro de extinción estemos, más os lucráis a costa de nuestra desaparición. ¡Qué se puede esperar de quien vende pequeños seres vivos metidos en llaveros de plástico, herméticos, con la seguridad de que morirán en unas pocas horas de asfixia!

Sí, vosotros nos llamáis "animales" ¡Qué paradoja! ¿no? cuando lo insultante es haber nacido humano. Vuestra especie es la única verdadera alimaña que puebla el planeta, como una peste asesina y letal.

¡Qué vergüenza ser pariente vuestro!










4 de febrero de 2015

En el camino

¿Cuántos pasos habremos dado en el camino?

Toda una vida caminando. Poniendo un pie delante del otro, avanzando, haciendo camino despacio. Descubriendo sitios, lugares, rincones. Trazando sinuosas líneas en el mapa. En ellos hemos desgastado las suelas de nuestros zapatos, hemos soportado rozaduras y ampollas. Nos han dolido los hombros bajo el peso de nuestras mochilas, y bajo su peso hemos sudado. Hemos tropezado y nos hemos levantado todas aquellas veces que caímos. Hemos pasado calor y frío, y el viento nos ha zarandeado. Lo hemos aguantado todo. Todo por caminar. Y me pregunto cuántos pasos más sumará nuestro camino.