A esa luna que esparce al mismo tiempo sombras en el bosque
y destellos en el agua.
A la luna en blanco y negro, y a la de cálidos naranjas.
A la luna redonda, y a la de estrecha uña afilada.A esa luna cómplice en ilusiones y desengaños,
alcahueta de amores y despechos,
sabedora de alegrías y desánimos,
encubridora de traiciones y recelos.
A la tímida luna diurna y a la noctámbula vanidosa.
A esa luna nuestra, Selene mentirosa.